lunes, 28 de marzo de 2011

El Faisán, ETA y la negociación

El Mundo, hoy, sobre el Faisán, ETA y la negociación:

«Es un accidente grave (las 13 detenciones). No sé qué deciros. Es algo que viene de hace dos años y es un asunto que viene del juez. Es un accidente importante, y cuando lo escuché, me irrité y entiendo que vosotros también lo estéis»

«Si el problema es el dinero, siempre se podrá arreglar por medio de una organización internacional. »


«El Gobierno ha hecho modificaciones con la intención de blindar el proceso: cambios en el Gobierno [Alfredo Pérez Rubalcaba se incorporó a Interior para continuar con una vía que conocía desde su cargo en el Congreso], cambio del fiscal jefe de la Audiencia Nacional [el anterior fiscal jefe era Eduardo Fungairiño]»

«No contábamos con el nivel de ataque del PP, de la mayoría de la prensa y de la AVT»
Cuatro apuntes rápidos:

(i) Las detenciones ordenadas por Grande-Marlaska, un accidente. Como el atentado de la T4 para Zapatero. Coherente.

(ii) Se reproduce literalmente algo denunciado en numerosas ocasiones por Mayor Oreja: blindar el proceso

(iii) Más sombras sobre las vías alternativas de financiación de ETA: Cotino y sus declaraciones de hace un mes

(iv) La importancia de las movilizaciones ciudadanas: el próximo 9 de abril, todos con las víctimas

No me resisto a destacar también otra información, sobre el 11M, incluida por El Mundo en portada:
La Unión de Oficiales de la Guardia Civil se persona en la causa contra Sánchez Manzano para -en palabras de su portavoz- «dirimir responsabilidades, apartar a las manzanas podridas y ejercer como garantes del esclarecimiento de la verdad, como siempre ha hecho la Guardia Civil»



2 comentarios:

Carmen Quirós dijo...

No voy a rebajar la gravedad del «Caso GAL»; pero en su esencia, era un intento, por torpe, ilegal e inadmisible que resulte, de luchar con la banda que tenía sumida a España en un baño de sangre que ha pasado a la historia con la etiqueta: «los años de hierro».

El Faisán es lo contrario: la colaboración activa del Gobierno para que ETA consolide los pasos de su cuaderno de ruta. Es el broche al acoso a las víctimas de la anterior legislatura, es la renuncia al Estado de Derecho. En cualquier país civilizado, esas actas provocarían la dimisión en cadena del Gobierno. El hecho de que el Ministro del Interior y el Señor Zapatero no hayan dimitido hasta este momento, demuestra que ni somos un país civilizado, ni estamos en una democracia.

Funes Memorioso dijo...

En el mejor de los casos -tal y como yo lo veo- dos caras de la misma enfermedad: falta de confianza en el Estado de Derecho, con consecuencias destructivas para éste.

Un saludo muy cordial, Carmen. Me ha alegrado verla por aquí.