lunes, 24 de enero de 2011

La cinta número 122

Podría ser el título de una película, pero no. Se trata del resumen de una buena noticia: Pablo Ruz, juez de la Audiencia Nacional encargado de la investigación del caso Faisán, ha decidido que hay que seguir investigando.

En el auto publicado hoy pide de todo: hora de salida del bar de quien pasa el teléfono a Elosúa, información sobre puertas de acceso, confección de un croquis de la zona, revisión de grabaciones, ampliación de información telefónica...

Si tuviera que destacar un detalle, sería el siguiente:



En efecto, el juez Ruz ha recuperado para la investigación a la Guardia Civil, en particular en lo relativo a los cortes e interrupciones sufridos por la cinta VHS nº 122, cinta para la que también solicita certificación de la cadena de custodia.

El magistrado Ruz parece disconforme con el informe previo -de la Comisaría General de Policía Científica- que señalaba:
"los cortes pueden haberse producido por agentes externos, accidentalmente o por deterioro, sin que existan elementos en la grabación analizada que apoyen una de las tres explicaciones en detrimento de las dos restantes"
Pues bien, Ruz quiere saber (transcribo de la imagen anterior):
"[...] si los referidos cortes de la imagen que aparecen en el visionado de la cinta VHS son simultáneos a la grabación original o si se producen con posterioridad, así como la intencionalidad o accidentalidad de los mismos, y caso de ser posible, la existencia de técnica audiovisual alguna por la que pueda llevarse a cabo la recuperación de imágenes borradas de la grabación original."
Para ello pone a trabajar a otros funcionarios.
Administración de Justicia, dice el escudo. Así sea.



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