sábado, 22 de agosto de 2009

Datos para Bruno

Bruno, contertulio de Nuestra teoría de la relatividad, el blog de Lisufelligus y Mr. Langley, expone con claridad una posición compartida por muchos:
"[...] a mi como simple votante de UPyD vuestros asuntos internos, mientras no os dediqueis a llevaros el dinero a dos manos como hacen otros, me importan mucho menos que la posibilidad real que teneis de [...]."
La frase de Bruno termina con "acabar con el bipartidismo". Otros dirán cosas distintas. Lo que me interesa destacar ahora es el común denominador: el desprecio por todo lo relacionado con la vida interna de los partidos, como si esto fuera algo ajeno, extraño a nuestras vidas e, incluso, impropio de gente decente o bien educada.

Dos consideraciones a modo de antídoto:

. La democracia interna de los partidos no es lujo ni capricho prescindible. Muy al contrario, es mandato constitucional:
Artículo 6
Los partidos políticos expresan el pluralismo político, concurren a la formación y manifestación de la voluntad popular y son instrumento fundamental para la participación política. Su creación y el ejercicio de su actividad son libres dentro del respeto a la Constitución y a la ley. Su estructura interna y funcionamiento deberán ser democráticos.
Justificar, por tanto, que los partidos políticos exhiban comportamientos antidemocráticos es legitimar lo que debería ser reprobado por todos, por anticonstitucional.

. Los partidos políticos se sostienen con dinero público. Sin necesidad de perpetrar ninguna fechoría, ya se llevan el dinero a manos llenas. Sus cosas (de los partidos) son nuestras (de todos, de los ciudadanos) -porque las pagamos- y una de dos: o fiscalizamos su funcionamiento o legitimamos el desafuero.

Datos que corroboran lo que digo:

Para un partido como UPyD, con un escaño en el parlamento español, otro en el vasco y un tercero en Europa, un repaso somero de las cifras accesibles en internet devuelve lo siguiente:
749.772,35 € financiación del Estado para gastos ordinarios, año 2009
45.000 € aprox. financiación del gobierno vasco para gastos ordinarios, año 2009
260.960 € financiación del Estado por el escaño nacional
100.402 € financiación del gobierno vasco por el escaño autonómico
513.166,15 € financiación por el escaño europeo

Todo ello sin contar los sueldos de los diputados.

A la vista de estos datos, resulta insensato desentenderse de la vida interna de los partidos, por muy nuevos y pequeños que sean. O los ciudadanos tomamos cartas en el asunto o tendremos -como vamos viendo- lo que nos buscamos: nada bueno y tendiendo a peor.

2 comentarios:

Eli Jo, la Berenjena Laica dijo...

El Estado financia a los partidos y los partidos soportan el Estado (que financia a los partidos), así de sencillo Funes, una simbiosis magnífica.

Bárbara Paraula dijo...

Muy interesante los datos que traes. Eso explica bastante bien el porqué de la purga interna... con dinero los afiliados ya no nos necesarios.